Hace unos años tuve la motivación en hacer un trabajo futurista por primera vez como parte de mi actividad artística. Ese trabajo se tituló “dinamismo” e interpreta el esfuerzo y el movimiento producido al maniobrar un velero. A continuación, describiré en qué consiste el movimiento futurista, cómo surgió mi interés en este estilo artístico y qué recursos formales utilicé para representar el movimiento de los objetos. Finalmente, contaré como desde la figuración de estas pinturas, me dirigí hacia la abstracción, un lenguaje habitual en mi trabajo artístico.
Breve descripción del movimiento futurista
El futurismo fue un movimiento artístico que surgió en Italia a principios del siglo XX. La estructura formalista que reflejaba sus obras, tenía como principal interés, expresar la locomoción de objetos en el tiempo, el crecimiento vertiginoso de las grandes ciudades y los avances tecnológicos de las maquinarias resultantes de la revolución industrial. Este fue un movimiento que tuvo repercusiones en la pintura y la escultura, así como en la arquitectura.
La mecánica del movimiento
Anteriormente, mencioné que mi primer trabajo futurista consistió en la representación dinámica de un atleta maniobrando un velero. En esta, el movimiento que expresaba la obra consistía en el desplazamiento del cuerpo del atleta con el fin de mantener el bote en equilibrio. Como ya había estudiado obras futuristas, tenía en cuenta que los trabajos más representativos solían ser aquellos que interpretaban la velocidad del tránsito de una motocicleta, una locomotora o un jinete que monta su corcel, por nombrar algunos. Sobre todo, las carreras de caballos me inspiraron en gran medida. Hice dos trabajos de este tipo, en los que traté de capturar el movimiento descrito por las figuras galopantes. Utilizando degradados de color, pude abstraer la silueta de las figuras para expresar la estela que percibe el ojo humano cuando se produce este desplazamiento.
El futurismo como referencia hacia la abstracción
En conclusión, las obras futuristas que hice fueron parte de un proceso de experimentación que vino a ser parte de un formalismo geométrico abstracto. Las gradaciones de colores y formas dieron paso a figuras geométricas más estructuradas que conformaban el espacio. Las obras que comenzaron esta nueva etapa consistieron en una serie de pinturas al óleo sobre lienzo tituladas “cuadrados compuestos”. En comparación con los anteriores trabajos, en estos hago una separación definitiva del estudio compositivo, colocando figuras geométricas como el cuadrado y otras formas elementales para componer el conjunto.
